Con la llegada del Sol a la conjunción con el nodo ascendente en los 12 grados del signo de Virgo, no solo se fija el momento en que el Sol comienza a recorrer el zodíaco dracónico a partir del 0° de Aries dracónico (proyectado en este caso sobre los 12 grados de virgo trópico), sino que comienza su recorrido por el hemiciclo en el que las características de los planetas son absorbidas y asimiladas por la personalidad, adquiriendo el ser humano nuevas facultades a través del aprendizaje. Es un sector de nutrición y crecimiento, siendo mayor este efecto cuanto más nos acercamos al 0° del signo de Aires, siempre en los signos que comprende este hemiciclo (Aires, Tauro, Géminis, Cáncer, Leo, Virgo, obviamente del zodíaco dracónico). Es decir, estamos en el momento de mayor fuerza de esta característica astrológica.