Formación de Astrólogos Profesionales: Estamos inscribiendo para Agosto de 2021

ESCUELA DE ASTROLOGIA "LA NACION DE URANIA"

(Modalidad Virtual)

Nuevas inscripciones para el mes de Agosto de 2021

 

No postergues más tu decisión de estudiar ASTROLOGÍA, en modalidad virtual y certificate como "ASTROLOGO PROFESIONAL"

Una completa formación en Astrología, estructurada en 6 módulos de 5 meses cada uno, con clases semanales de una hora y media de duración. Interiorizate de los contenidos de cada uno de los módulos de nuestra carrera y de nuestros seminarios permanentes en nuestra PÁGINA DE CONTACTO.
 

Módulo 1: Comienza el Jueves 5 de Agosto

Módulo 2: Comienza el Martes 3 de Agosto

Módulo 3: Comienza el Miércoles 4 de Agosto

Módulo 4: Comienza el Sábado 7 de Agosto 

Módulo 5: Comienza el Viernes 6 de Agosto 

 Si ya tenés conocimientos de astrología y no querés hacer la carrera completa, podés participar de alguno de nuestros seminarios permanentes: 

  • Astrología Dracónica
  • Rectificación de la hora de nacimiento
  • Cálculo manual de una carta natal
  • La carta natal como partitura musical
  • Direcciones simbólicas y cúspides progresadas
  • Retornos y Revoluciones
  • Astronomía aplicada a la astrología.
  • Herramientas astrológicas aplicadas a lo terapéutico

Cursos totalmente interactivos, con provisión de material digitalizado, libros, apuntes, tablas. Las clases quedan grabadas en video para su posterior consulta. Se provee software de cálculo básico y se asesora en la compra e instalación de software profesional.


 

La retrogradación de los planetas como herramienta necesaria en la técnica de las progresiones secundarias

Por Néstor Echarte

 

Existe una tendencia a la simplificación, hablando en términos astrológicos, cada vez que se intenta explicar el efecto de la retrogradación planetaria en el análisis de una carta natal. Desde pensar que perderemos el amor que durante tanto tiempo estuvimos disfrutando, si quien retrograda es el planeta Venus, hasta llevarnos a temer que irremediablemente perderemos nuestros pocos ahorros si el que retrograda es Mercurio. Ni hablar entonces de retrogradaciones mucho más extensas en tiempo, como las de Urano, Neptuno o Plutón que serían capaces (siempre en términos exagerados) de provocar enormes tragedias en el seno de la humanidad, haciéndonos pagar entonces, karma mediante, “ culpas propias y ajenas por no haber tenido la precaución de cumplir con los preceptos divinos que la posición de mi nodo me tenía reservada y, sobre todo, porque el mismo se encontraba retrógrado (SIC)”. Juro que no caeré en la tentación de tener que explicar esto último.

Tampoco abonaré la teoría que dice que si abundan en mi tema natal planetas en retrogradación, estaré a un paso de lograr un máster en espiritualidad.

Ensayo de aplicación de la Trutina de Hermes en análisis astrológicos no tradicionales

Por Néstor Echarte

Hermes Trismegisto, el “tres veces grande”, pese a su cuestionada existencia en el mundo real dejó una rica y prolífica obra que sustenta las bases de la mayoría de las disciplinas que nutren al mundo esotérico-espiritual. La astrología, muchas veces calificada como “la madre de todas las ciencias”, no escapa a esta construcción, y algunas de sus reglas son aceptadas a rajatabla como sustento y metodología de determinadas formas de realización de procedimientos astrológicos.

La “Trutina de Hermes”, cuya autoría se atribuye a nuestro personaje, recreada luego por Claudio Ptolmeo en el apartado nro. 51 de su “Centiloquio”, señala con claridad que “el signo en que la Luna se encuentre en el momento de nacer, es el signo que se encuentra en el Ascendente o Descendente del momento de la concepción, y el signo donde ella se encuentre en el momento de la concepción, o bien el opuesto, será el signo Ascendente del Nacimiento”

Ptolomeo propone además una serie de chequeos adicionales vinculados a la posición de la Luna en relación al Sol, para poder determinar sin error posible, el momento exacto de la concepción. En relación a ese tema, nos tomaremos algunas licencias, ya que como se afirmó en el título de este ensayo, no se trata de obtener el momento exacto de la concepción de un ser humano, sino que adaptamos la técnica a una temática algo menos ortodoxa.